“Vivimos
en tiempos exponenciales”, se trata de una de las frases más
recordadas de la serie de los videos “did you know”.
El
cambio ha sido una constante en la historia del hombre, y una de las
verdades eternas “el cambio sucede”. La única realidad objetiva
es el escenario que tenemos fuera, que el cambio sucede con nosotros
o sin nosotros, si bien el cómo lo vivimos, como lo percibimos,
nuestra actitud ante la realidad cambiante y el grado de nuestra
pasión o aceptación de las nuevas realidades son los que van a
marcar la diferencia entre las personas y organizaciones de éxito o
las personas q no lo son tanto.
Los
cambios actuales son exponenciales, tanto es así que para algunos
estamos en el inicio de una nueva era. En cualquier caso las
competencias de adaptación y flexibilidad se vuelven claves en el
éxito profesional actual, tanto a nivel emprendedor o directivo de
empresa, porque en realidad, y al final de todo parafraseando a
Javier Iriondo,” todo directivo debe ser un emprendedor para
asegurar el éxito de su organización”, en este sentido no es
casual que en los procesos de selección de directivos actuales la
capacidad de adaptación sea una de las competencias más valoradas.
Martha Alles |
Martha
Alles, la gran maestra de las competencias a finales de los noventa
define la adaptación como “la capacidad de amoldarse a los
cambios, de modificar la propia conducta para alcanzar determinados
objetivos, dificultades, datos o cambios en el medio, la versatilidad
de nuestro comportamiento para adaptarnos a nuevos o distintos
contextos, situaciones o personas”
Las
escuelas tradicionales de negocios apoyan la adaptación
organizacional a través del aporte de conocimientos, especialmente
de dirección estratégica, con herramientas para análisis que te
permitan una mejor compresión de la realidad y una toma de
decisiones más eficaz,( los DAFO, CAME, Análisis Fuerza de Porter)
entre otros son buena muestra de ello, y sin duda herramientas muy
necesarias para comprender, adaptarnos a las nuevas situaciones y
tomar decisiones eficaces.
Sin
embargo, y si bien el conocimiento de análisis es importante, no es
suficiente. El conocimiento nos ayudará a entender pero la
modificación de nuestra conducta con la que lo abordamos,
imprescindible en un proceso de adaptación y cambio exitoso,
requiere de trabajar palancas personales que nos permitan ver un
mundo de oportunidades, a veces de modificar nuestras creencias y
nuestra percepción de esa realidad objetiva; y ahí donde entra el
trabajo de un coach apoyando la apertura y el desarrollo personal
necesario para abordar adecuadamente la adaptación positiva en un
“reinventarse” continuo sacando el mayor partido a los nuevos
escenarios, conscientes de nuestras posibilidades y apoyados en
nuestros valores.
Descubrir
el arte de ser flexibles con mentes de arcilla modelándose
continuamente como apuntaba Walter Riso y con la humildad y
aceptación necesarias para enfrentarlas, y rompiendo con nuestras
creencias limitantes o miedos que nos hacen ser menos eficaces.
Desde
una perspectiva actual el desarrollo del talento pasa no sólo por
desarrollar el conocimiento y las habilidades necesarias para el
éxito, sino también en trabajar a través del coaching la actitud y
el comportamiento como palancas de éxito. En esto están los
departamentos de RRHH de las grandes empresas, y es que para nuestra
formación y desarrollo, como decía el escritor francés Paul Valery
“el futuro ya no es lo que era” y el coach forma parte ya de ese
nuevo futuro que acompaña y apoya al empresario y emprendedor en su
éxito empresarial.
Aurelio
Carrillo
Socio-
Director Empatía Consulting
Coach Acreditado-Aprocorm nº1435
Coach
certificado por AECOP
@aureliocamo
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