Actualmente trabajo como coordinador y coach en la I
Lanzadera de Empleo y Emprendimiento Solidario de Valencia. A lo largo de esta
experiencia vivo como la autoestima de las personas viene minada por el
sentimiento de culpa, “por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa.” Demasiados “NO”.
Actuar es el principio, todos oímos y leemos artículos como
este que quedan en eso, en una lectura.
El despertar empieza recibiendo algunas
sugerencias como posibles y visto que no tenemos resultado haciendo lo que
estábamos haciendo las tomamos como un ..
¿Y si?
¿Y si probara incluirlas en
comportamiento diario como si fuéramos responsables de nuestra vida hasta
integrarlas como un hábito?
Es cuestión de tiempo y constancia adquirir la
virtud de decidir sobre nuestra vida.
Cambiando el victimismo por la responsabilidad en esta
película, hará que los fantasmas del desempleo dejen de asustarnos, aunque cada
día los veamos en el espejo.
Una mañana me miré al espejo y me pregunté:
-
¿Y si estos fantasmas los creara yo?
- Imposible, pienso
– Dan demasiado miedo.
Viviendo como víctimas la responsabilidad estará en otros y
por tanto fuera de nuestro campo de acción. Viviendo con responsabilidad
cambias y actúas dentro de tu campo de acción. Bajo la responsabilidad conoces
los fantasmas que creas y que alimentan tus creencias y tu zona de confort.
En esta película no estás solo, hay muchas personas que
comparten miedos y están esperando a que te acerques, los compartas y
compruebes que eran sólo eso, miedos.
Son cada vez más las personas que deseamos compartir,
aprender y crecer al lado de otros, no deja de ser una creencia el hecho de que
no nos merecemos la libertad de ser lo que queramos ser. El mundo está sediento
de personas con valores, motivación, con ganas de superar adversidades y asumir
nuevos retos. No sabemos que estamos preparados hasta que nos nos atrevemos a
lanzarnos a ser los protagonistas de nuestra vida.
Empieza preguntándote:
¿Cuál es tu objetivo profesional?
Cuanto más claro lo tengas más sencillo será trazar un plan
para lograrlo.
Las llaves no están donde hay más luz, si no donde las
perdiste, por eso continúa preguntándote:
¿Quién eres?
Y si te resulta difícil responder pregunta a las personas
que te quieren.
Y por último, si te acercas a quien eres, y sabes tu
objetivo profesional será el momento de trazar tu plan de acción, trazando todo
aquello que has de hacer para conseguirlo. Es difícil, pero nadie dijo que iba
a ser fácil, pero te aseguro que merecerá la pena.
“Si de verdad vale la pena hacer algo, vale la pena
hacerlo a toda costa” Gilbert K Chesterton
SERGIO LINARES
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